Como una libélula.

Ya basta de degastarte tanto,

tu también tienes derecho a volar.

Libre como una libélula que va migrando,

o como las gaviotas en el mar.

no dejes que nadie te quite tus sueños,

porque estos te llenan de felicidad.

La felicidad que se necesita para vivir a pleno la vida,

porque es tan corta que siempre al máximo la debemos disfrutar.

Siempre se libre como las libélulas,

viviendo la vida en libertad y armonía.

Que nuestro paso por esta tierra es muy corto,

y por eso es importante disfrutarlo siempre con alegría.

Porque no sirve estar triste por quien no nos quiere ni nos valora,

sabiendo que en este mundo, existen personas que por nosotros darían la vida.

A esas personas es quienes les debemos todo,

no a quienes están con nosotros por conveniencia.

 

La libertad y la unión no tienen precio,

son dos cosas que siempre nos complementan.

para disfrutar la vida a pleno,

con las personas que más nos importan.

 

Yuly Torres.